jueves, 29 de octubre de 2015

Tan fugaz.

Quiero regalarte un pedacito de cielo, algo que te empuje a salir de la habitación, a despojarte de las sábanas y del manojo de miedos. Quiero que dejes de coleccionar amaneceres desde la ventana de un apartamento gris, que vivas en la playa con la arena entre los dedos y un suave y salado sabor en la piel. Quiero que te saltes las normas de lo políticamente correcto y me digas que el amor no existe aunque lo lleves dentro. Quiero, a tí, te quiero. Con el destello y la magia de alguien que lee a Cortázar mientras suena "La vie en rose", con el deseo de alguien que no lleva bragas y utiliza un perfume que hipnotiza a los figurantes de esta historia llamada vida (a ratos). Te encuentro en los semáforos en ámbar, un color que deja puertas entreabiertas, posibilidades remotas que no paro de imaginar cuando nuestros corazones laten distantes y acompasados. 
Alguien: tú. Floreces como los lirios en primavera en mitad del frío invierno, joder, eres pura poesía que todavía no ha sido escrita. 
Y ojalá sigas siendo un secreto

lunes, 26 de octubre de 2015

Preludio de invierno

Me pierdo en el frío de un invierno que acecha, y tú susurras en la oscuridad estremeciendo mis sentidos.
No puedo evitarlo, siempre vuelvo si me llamas, pero tienes el don de desaparecer tan rápido como apareces. 
Cuántas veces he gritado un quédate en silencio...
Sé que no me quieres, me he conformado con ese sucedáneo de amor, pero ahora no importa. 
Te acordarás de mí por los bares, y por las calles. Te acordarás de mi los días de lluvia y pisarás hojas secas con la mirada llena de amargura. 
Recordarás los polvos al cambiar las sábanas y echarás de menos la magia en la que no creíste.
No quiero ser vanidosa, es intuición femenina. 

La vida juega con nosotros a su antojo y en nosotros está aprender la lección, y aunque te encuentro, no te busco. Ya no. Necesito alguien que escuche mis teorías, fomente mi locura y no frene la rebeldía. A veces quiero versos en vez de besos, variedad en terreno conocido. 
¿Sabes cual es el problema? 
Que quiero, y no sé cómo ser querida,
 así que no te quiero en mi vida.

miércoles, 21 de octubre de 2015

Atrapasueños.

Llegaste a mi vida y la cambiaste
Hace apenas tres semanas estaba tan vacía que incluso daba pena y ahora ...
Salí de casa con los labios rojos y te encontré por casualidad, aunque a veces creo que la vida te puso en mi camino a propósito, como un regalo o como un castigo, no sé.
Te vi. Te miré, me inundaste con tu aroma y me rompiste los esquemas.
Eres magia, eres música, eres noche. Volví a casa con los labios rojos y mil dudas, cargada de miedos e inseguridades. Ya está, con una sola mirada cambiaste mi universo, ¿cómo cojones es eso posible?
Me gusta la forma que tienes de crear revoluciones a cada paso que das, me gusta tu risa, tus gritos, tus silencios incómodos. Me encanta cuando me coges de la mano y me miras, me flipa el olor de tu pelo y la forma en la que te lo apartas siempre hacia un lado.
Un alma tan rebelde, tan incorformista y tan pura que se representa en forma de mujer huracán y yo cargada de dudas. Aún te sigo descubriendo y odio cuando mientes, porque sé que me mientes.
No es fácil deshacerse de los miedos y aún así no hay ni rastro de ellos cuando me abrazas, y luego llego a casa y se me caen todos encima.
Hace apenas tres semanas estaba tan vacía que incluso daba pena y ahora... ahora estoy rota, pero mereces la pena.